Imagina lo frustrante que sería descubrir que elegiste una tasa de interés que no se ajusta a tus necesidades financieras a largo plazo. O peor aún, que podrías estar pagando más de lo necesario por tu nuevo hogar. Sabemos que elegir un crédito hipotecario con el banco, te puede generar muchas dudas, especialmente cuando se trata de entender los diferentes montos, plazos e intereses a pagar.
¿Te gustaría tomar una decisión informada y asegurar la tranquilidad financiera de tu familia?
En este blog, te explicaremos cuáles son los tipos de tasas de interés más comunes en los créditos hipotecarios bancarios y cómo elegir el que mejor se adapte a tus objetivos.
¿Qué es una tasa de interés?
La tasa de interés es el costo de pedir dinero prestado, a una institución financiera. Por lo tanto, es el precio que pagas por poder adquirir tu casa y pagarla a un plazo determinado. Este es un factor clave que influye en tus pagos mensuales de la hipoteca. Cuanto más alta sea la tasa, mayores serán tus pagos. Por eso, elegir la tasa de interés adecuada es fundamental para asegurar la estabilidad de tu economía a largo plazo.
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Tipos de Intereses
Los intereses se refieren al pago que realizarás por el capital que te presta el banco, dependiendo el tipo de crédito hipotecario. Esto quiere decir que el banco te da cierta cantidad de dinero para que compres tu casa, esa cifra se divide en años para saber cuánto pagarás cada mes y durante cuánto tiempo. Posteriormente a esa cantidad se le suman los intereses, los cuales quedan definidos cuando firmas tu contrato.
El objetivo de una hipoteca bancaria es otorgarte financiamiento, por lo tanto, debes elegir el tipo de interés que más se ajuste a tus necesidades. A continuación, te platicamos más sobre ellos:
Tasa fija
La tasa fija es preferida por personas que buscan la certeza de saber cuánto pagarán durante la vida de su crédito, y así tener un plan más detallado de su situación económica. El porcentaje de interés se define desde el principio del contrato de manera anual y se respeta hasta que hayas completado el pago de tu préstamo.
La ventaja que presentan los intereses fijos es que las mensualidades no cambian, aunque haya movimientos en el mercado financiero, o sea que la inflación no afecta a tu crédito. En general, todos los bancos ofrecen ambos esquemas de tasa de interés; fijo y variable.
Los bancos con un crédito hipotecario con tasa fija son:
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Tasa variable
Este tipo de tasa, cambia de acuerdo con los movimientos financieros del mercado que dicta la inflación o la tasa de interés interbancaria. Estos cambios se dan de manera diaria, por lo que los créditos que se soliciten con la tasa de interés variable, cambiarán mes con mes.
Sin embargo, el Banco de México determina cuáles son los intereses de acuerdo con la situación bursátil del país. Esta suele actualizarse cada tres meses, así que las hipotecas que cuentan con interés variable son reajustadas durante estos periodos.
La ventaja de este esquema es que el porcentaje de los intereses a pagar puede bajar si el mercado así lo indica, lo que reducirá el pago mensual.
Si optas por este tipo de interés, es importante que el banco te explique claramente las condiciones para que evalúes si te conviene.
Algunos bancos que ofrecen un crédito hipotecario con tasa variable son:
Tasa mixta
La tasa mixta, es un poco distinta, ya que se refiere a una combinación en el movimiento de los intereses de los dos esquemas anteriores. La idea es tener una combinación que funcione en pro de tu economía. También puedes preguntar a tu ejecutivo bancario los detalles, pues esto varía dependiendo del banco.
Algunos bancos que ofrecen un crédito hipotecario con tasa mixta son:
Tasa creciente y decreciente
La tasa de interés creciente funciona de la siguiente manera: durante los primero años de vida del crédito las mensualidades que se pagarán serán más bajas, y conforme avance la vida de la hipoteca, las mensualidades se irán incrementado siguiendo el acuerdo que se hizo en el contrato. Aquí tu ejecutivo bancario deberá mostrarte y explicarte tu tabla de amortización, que es el documento donde se presenta el plan de pagos del crédito.
Este tipo de tasa de interés le conviene a personas que se encuentran trabajando y que contarán con aumentos en sus ingresos.
Algunos bancos que ofrecen un crédito hipotecario con estas tasas son:
En cambio, la tasa decreciente funciona cuando se han realizado 12 pagos seguidos y el banco considera que puede ofrecer una tasa de interés menor. Sin embargo, esta cantidad se aplica a los primero años del crédito, y es muy raro que una institución lo ofrezca. En México, solamente Scotiabank lo ofrece con una tasa del 10.50% al 12.50%.
*Recuerda: Dependiendo del banco que elijas las tasas pueden variar. Considera los anteriores ejemplos como información general, si tienes más dudas acércate al banco de tu elección.
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Como has visto, entender los diferentes tipos de tasas y sus implicaciones es fundamental para tomar una decisión. Al elegir la tasa de interés adecuada, estás dando un paso hacia tu estabilidad y cumpliendo uno de los proyectos más importantes de tu vida.
Compara las ofertas de diferentes bancos, analiza tu perfil financiero y si aun tienes dudas, realiza una precalificación hipotecaria. ¡Invertir tiempo en esta decisión te permitirá asegurar la tranquilidad de tu familia y disfrutar de tu nuevo hogar!
